Escapada a BUDAPEST (parte 2)

Día 3 de agosto

Levantados y listos a las 9 para evitar el calor, pero ya hace un calor agobiante. Nos dirigimos a Ciudadella a descubrir la ciudad desde lo alto.

 

Aprovechamos para comprar algunos souvenirs y postales, y nos vamos a la Isla Margarita. Haciendo una parada para comer un langos con queso y ajito muy rico en un túnel subterráneo en el que descubrimos unas ruinas romanas, aunque no se podía entrar dentro, una pena porque desde la cristalera tenían muy buena pinta, hubiera estado interesante.

 Nos perdemos un poco para llegar ya que solo había un autobús y teníamos que buscar la combinación correcta y la parada exacta y pensar bajo ese sol era horrible. 

 

  

Pero al final después de coger mil transportes (metro, tranvía y bus) llegamos a una isla artificial pero es solo para espacios verdes y piscinas y fuentes. Una fuente en concreto era curioso porque la gente se sentaba alrededor  para refrescarse los pies mientras había música y los chorros salían al ritmo de ella.

Después fuimos al Fisherman Bastion, un sitio  precioso con muchos estilos mezclados, y con muuuchos turistas, demasiados.

Y ya después de un día largo y caluroso como hacía mucho que no pasaba uno así, nos fuimos a tomar algo debajo de casa Ludi y yo, nos costó 0,7 céntimos cada cerveza (200 florines).

Y luego mientras intentábamos entrar en el hostel llego el dueño con un alemán un poco extraño a simple vista y con dos pistolas de agua en la mochila. Duchita, pasta con pesto y a descansar.